viernes, 13 de diciembre de 2024

VIEJO YO, NADA QUE VER, DIJO CALEB,Y CONQUISTÓ SU TERRITORIO PLAGADO DE GIGANTES...EL TENÍA 85 AÑOS

 


Introducción:

La historia de Caleb y los espías nos proporciona una lección profunda sobre la perseverancia, la fe y la herencia en el plan de Dios. En medio de desafíos y decisiones cruciales, Caleb se destaca como un ejemplo inspirador de aquellos que siguen fielmente al Señor. Acompáñenme mientras exploramos las lecciones valiosas que podemos extraer de la vida de este hombre de fe.

I. La Determinación de Caleb de Seguir a Dios - Números 14:24 24 Pero a mi siervo Caleb, por cuanto hubo en él otro espíritu, y decidió ir en pos de mí, yo le meteré en la tierra donde entró, y su descendencia la tendrá en posesión.

Caleb es presentado como un hombre "que tiene un espíritu diferente" en Números 14:24. Su determinación de seguir a Dios completamente lo distingue entre los espías. A menudo, en la vida cristiana, se nos llama a tener un espíritu diferente, uno que busque la voluntad de Dios por encima de todo.

II. Caleb, un Hombre que Siguió al Señor Completamente - Números 14:8  Si Jehová se agradare de nosotros, él nos llevará a esta tierra, y nos la entregará; tierra que fluye leche y miel.

En Números 14:8, Caleb insta al pueblo a confiar en Dios y a no temer. Su confianza no se basa en la situación actual, sino en la fidelidad del Señor. Siguiendo el ejemplo de Caleb, debemos aprender a confiar en la fidelidad de Dios incluso en medio de circunstancias desafiantes.

III. La Perspectiva Segura de Caleb - Números 13:30 "Entonces Caleb hizo callar al pueblo delante de Moisés, y dijo: Subamos luego, y tomemos posesión de ella; porque más podremos nosotros que ellos".

Mientras que la mayoría de los espías veían desafíos insuperables en la Tierra Prometida, Caleb mantenía una perspectiva segura. Veía más allá de las apariencias y confiaba en la promesa de Dios. En nuestra vida, debemos esforzarnos por adoptar la perspectiva segura de la fe, confiando en que Dios es capaz de cumplir sus promesas.

IV. La Mayoría versus la Convicción de Caleb - Números 13:31-33 "Mas los varones que subieron con él, dijeron: No podremos subir contra aquel pueblo, porque es más fuerte que nosotros. Y hablaron mal entre los hijos de Israel, de la tierra que habían reconocido, diciendo: La tierra por donde pasamos para reconocerla, es tierra que traga a sus moradores; y todo el pueblo que vimos en medio de ella son hombres de grande estatura.También vimos allí gigantes, hijos de Anac, raza de los gigantes, y éramos nosotros, a nuestro parecer, como langostas; y así les parecíamos a ellos".

Caleb se encuentra en una situación donde la mayoría de los espías expresan temor y duda. Sin embargo, su convicción en la fidelidad de Dios lo hace destacar. La lección aquí es clara: no siempre seguir a la multitud es seguir a Dios. La convicción basada en la verdad  bíblica debe ser nuestro guía.

V. La Diferencia de Espíritu - Números 14:24 24 Pero a mi siervo Caleb, por cuanto hubo en él otro espíritu, y decidió ir en pos de mí, yo le meteré en la tierra donde entró, y su descendencia la tendrá en posesión.

La Escritura destaca la "diferencia de espíritu" de Caleb. En un mundo donde la conformidad a menudo parece más fácil, debemos aspirar a esa diferencia de espíritu que nos distingue como seguidores de Cristo. Ser luz en la oscuridad a menudo implica tener un espíritu diferente.

VI. La Recompensa de Caleb por su Fidelidad - Josué 14:6-12 "Y los hijos de Judá vinieron a Josué en Gilgal; y Caleb, hijo de Jefone cenezeo, le dijo: Tú sabes lo que Jehová dijo a Moisés, varón de Dios, en Cades-barnea, tocante a mí y a ti. Yo era de edad de cuarenta años cuando Moisés siervo de Jehová me envió de Cades-barnea a reconocer la tierra; y yo le traje noticias como lo sentía en mi corazón. Y mis hermanos, los que habían subido conmigo, hicieron desfallecer el corazón del pueblo; pero yo cumplí siguiendo a Jehová mi Dios. Entonces Moisés juró diciendo: Ciertamente la tierra que holló tu pie será para ti, y para tus hijos en herencia perpetua, por cuanto cumpliste siguiendo a Jehová mi Dios. 10 Ahora bien, Jehová me ha hecho vivir, como él dijo, estos cuarenta y cinco años, desde el tiempo que Jehová habló estas palabras a Moisés, cuando Israel andaba por el desierto; y ahora, he aquí, hoy soy de edad de ochenta y cinco años. 11 Todavía estoy tan fuerte como el día que Moisés me envió; cual era mi fuerza entonces, tal es ahora mi fuerza para la guerra, y para salir y para entrar. 12 Dame, pues, ahora este monte, del cual habló Jehová aquel día; porque tú oíste en aquel día que los anaceos están allí, y que hay ciudades grandes y fortificadas. Quizá Jehová estará conmigo, y los echaré, como Jehová ha dicho".

Caleb, debido a su fidelidad, recibe la recompensa de heredar una porción de la tierra prometida. Dios honra la fidelidad y la perseverancia. Como creyentes, nuestra fidelidad a Dios no pasa desapercibida; hay recompensas eternas reservadas para aquellos que perseveran hasta el final.

VII. El Cumplimiento de la Promesa a Caleb - Josué 14:13-14

13 Josué entonces le bendijo, y dio a Caleb hijo de Jefone a Hebrón por heredad. 14 Por tanto, Hebrón vino a ser heredad de Caleb hijo de Jefone cenezeo, hasta hoy, por cuanto había seguido cumplidamente a Jehová Dios de Israel.

En Josué 14:13-14, vemos cómo se cumple la promesa de Dios a Caleb. La fe firme de Caleb se traduce en una herencia tangible. Dios es fiel para cumplir lo que ha prometido, y la historia de Caleb lo atestigua de manera poderosa.

VIII. Caleb, un Ejemplo de Valor y Fe - Josué 14:10-12..TENÍA 85 AÑOS 10 "Ahora bien, Jehová me ha hecho vivir, como él dijo, estos cuarenta y cinco años, desde el tiempo que Jehová habló estas palabras a Moisés, cuando Israel andaba por el desierto; y ahora, he aquí, hoy soy de edad de ochenta y cinco años. 11 Todavía estoy tan fuerte como el día que Moisés me envió; cual era mi fuerza entonces, tal es ahora mi fuerza para la guerra, y para salir y para entrar. 12 Dame, pues, ahora este monte, del cual habló Jehová aquel día; porque tú oíste en aquel día que los anaceos están allí, y que hay ciudades grandes y fortificadas. Quizá Jehová estará conmigo, y los echaré, como Jehová ha dicho".

Caleb, en su vejez, muestra un valor y una fe inquebrantables al enfrentar gigantes en la tierra prometida. Su ejemplo nos desafía a no desistir ni retroceder, sino a avanzar con valentía incluso cuando enfrentamos desafíos aparentemente insuperables.

IX. La Lección de Caleb para las Nuevas Generaciones - Josué 14:15..HABIAN GIGANTES.

15 Mas el nombre de Hebrón fue antes Quiriat-arba;[a] porque Arba fue un hombre grande entre los anaceos. Y la tierra descansó de la guerra.

La lección de Caleb no es solo para su generación, sino también para las nuevas generaciones. Debemos transmitir la importancia de la fidelidad, la perseverancia y la confianza en Dios a aquellos que nos siguen. La herencia espiritual es un legado precioso que debemos compartir.

Conclusión:

La historia de Caleb y los espías nos desafía a seguir al Señor con determinación, a tener un espíritu diferente en un mundo conformado y a confiar en la fidelidad de Dios, incluso cuando enfrentamos desafíos aparentemente insuperables. Que la perseverancia, la fe y la herencia espiritual de Caleb inspiren nuestras vidas y las de las generaciones futuras. Que, como Caleb, podamos avanzar con valentía hacia la tierra prometida que Dios tiene para cada uno de nosotros


¿Te sientes viejo, Caleb?...Dijo, no,  estoy con mis fuerzas intactas, aunque tenga 85 años, lista para tomar posesión de mi heredad; listo para echar fuera los gigantes, que lo habitan.

El Señor me ha permitido vivir, tal como prometió, estos cuarenta y cinco años, desde el día en que el Señor habló estas palabras a Moisés, cuando Israel caminaba en el desierto; así que ahora tengo ochenta y cinco años. Todavía estoy tan fuerte como el día en que Moisés me envió. Como era entonces mi fuerza, así es ahora mi fuerza para la guerra, y para salir y para entrar Josué 14:10-11

 


A los 85 años creo que muchos de nosotros nos sentiríamos acabados, pero no Caleb. La promesa de Dios no sólo le había dado vitalidad a su alma sino también a su cuerpo, durante 45 años su fe había permanecido inquebrantable y ahora era más fuerte que nunca. Mientras en el desierto muchos se marchitaron, cayeron, dudaron, se rebelaron y murieron, la fe de Caleb floreció estando bien fundada en las promesas de Dios y ahora él se sentía tan fuerte como en su juventud (si, los 40 años eran el esplendor de la juventud entre los hebreos). Al parecer Caleb se gloriaba en su fuerza pero no es así, se veía a sí mismo y veía un milagro: en su vejez, a sus 85 años, era un conquistador y guerrero nato, con la experiencia de un anciano y la vitalidad de un joven, era algo que no se podía explicar sin la intervención sobrenatural de Dios. La misma intervención divina que le dio una promesa y le dio la vida larga para cumplirla, también le daba las fuerzas físicas para luchar por esa promesa.

 Luchar, ¿por algo seguro?

Ahora pues, dame esta región montañosa de la cual el Señor habló aquel día, porque tú oíste aquel día que allí había Anaceos con grandes ciudades fortificadas. Tal vez el Señor esté conmigo y los expulsaré como el Señor ha dicho. Josué 14:12

Alguien, cuyo nombre no recuerdo, ha dicho que el hecho de que los dones de Dios sean por pura Gracia no quiere decir que nosotros no debamos hacer ningún esfuerzo. Caleb lo pone de manifiesto. Dios le había prometido un lugar, que el ciertamente llegaría y lo conquistaría, entonces va con Josué y le dice de manera sutil: esa tierra es mía, no la incluyas en el sorteo, dámela.

Se la pide no porque sea la tierra más vistosa, tenía áreas poco fértiles, era un territorio montañoso y escabroso, pero Caleb tenía razones más poderosas. Allí habitaban los gigantes cuyos relatos habían atemorizado al pueblo de Israel, los que todos decían que los acabarían como a langostas. Aquellos mismos que Caleb dijo que Dios expulsaría, que Dios era más grande que ellos y que serían presa fácil. Ahora vemos que Caleb no era solo hablar, ha llegado el tiempo de actuar, y tiene la confianza de que Dios estaría con El. Cuando dice “tal vez el Señor esté conmigo”, solo usa un modismo hebreo que denota la seguridad. Es una construcción que va haciendo, que si se pudiera sintetizar sonaría algo así: “si Dios me hizo un juramento respecto a esa tierra, me mantuvo con vida durante 45 años contra todo pronóstico y a mis 85 años me da inexplicablemente la misma fortaleza física que en el pasado, tal vez esté conmigo para expulsar a los gigantes ¿no crees?”

Conmemorando una alianza

Por tanto, Hebrón vino a ser hasta hoy heredad de Caleb, hijo de Jefone el Cenezeo, porque siguió plenamente al Señor, Dios de Israel. Y el nombre de Hebrón antes era Quiriat Arba (la ciudad de Arba). Pues Arba era el hombre más grande entre los Anaceos. Entonces la tierra descansó de la guerra. Josué 14:14-15

Me inclino a pensar que lo que dominaba la mente de Caleb en el momento en que peleó y conquistó su heredad, fue lo que había guardado su corazón todo ese tiempo: las promesas de Dios, el pacto que Dios había hecho basado en su misericordia al redimir a su pueblo de la esclavitud. No hay ninguna nota de sorpresa en el libro de Josué respecto a la conquista de la región montañosa por parte de Caleb, para nada, era lo que todos estaban esperando, y como dato adjunto la labor editorial nos dice que sus hijos la conservaban hasta el momento en que el libro fue escrito. Sin embargo llama poderosamente la atención la acción de Caleb luego de la conquista.

La ciudad principal era llamada la ciudad de Arba (Quiriat Arba se cree pudo haber sido una especie de capital de 5 ciudades emparentadas), era básicamente un monumento gigante para otro gigante, una exhibición completa de orgullo. Arba era su rey, su campeón, su referente, lo que le daba identidad a esa región. Pero Arba no era nadie comparado con el Señor Todopoderoso, y por eso Caleb le cambia el nombre a esa ciudad y le llama Hebrón, un lugar de pacto.

La idea detrás del nombre Hebrón, es un lugar de encuentro, un lugar de asociación, un lugar donde existe un pacto o una alianza. Por tanto Hebrón vino a dar forma a esa promesa que Caleb había visto cumplida en su vida, que Dios estaba con su pueblo por medio de la Alianza, que ese es el lugar donde Dios viene al encuentro del ser humano y le ofrece su amistad. Hebrón sería un lugar importante, lo fue en el tiempo de los patriarcas y lo sería aun siendo el lugar donde Dios seguiría siendo fiel a su Palabra. En Hebrón Dios hizo un pacto con otro hombre, David, que fue coronado rey en este lugar y de quien vendría nuestro Señor Jesucristo.

Conclusión:

La vida de Caleb nos ha llevado desde la formación temprana de su fe en el Pacto de Dios, la defensa de las promesas de Dios ante una gran multitud, la recepción de la Gracia y misericorida de Dios, la paciencia de esperar el cumplimiento de la promesa y finalmente la obtención de su herencia.

Su vida, es un calco de la vida cristiana, y existe mucho que podemos aprender de la vida de este hombre. Nuestra herencia prometida va más allá de una posesión material, es Cristo mismo que nos ha sido prometido y esa herencia no puede ser cambiada, ni nuestro camino truncado, sino que Dios que nos ha prometido la vida eterna también nos dará todo lo necesario para perseverar en ella.

 Como lo dice el apóstol PedroBendito el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que según su grande misericordia nos hizo renacer para una esperanza viva, por la resurrección de Jesucristo de los muertos, para una herencia incorruptible, incontaminada e inmarcesible, reservada en los cielos para vosotros, que sois guardados por el poder de Dios mediante la fe, para alcanzar la salvación que está preparada para ser manifestada en el tiempo postrero. En lo cual vosotros os alegráis, aunque ahora por un poco de tiempo, si es necesario, tengáis que ser afligidos en diversas pruebas… 1ª Pedro 1:3-6

 

Por tanto aprendamos de la vida de Caleb, a no hacer concesiones con la incredulidad, a ser pacientes ante las pruebas y los desiertos largos de nuestra vida, a no ser pasivos en la obtención de esta herencia sino a luchar por aquello que ya tenemos seguro, a saber que la Gracia de Dios no anula nuestra responsabilidad sino que más bien la establece de una forma mucho más precisa y con aspiraciones más altas que la que tuvo Caleb en su tiempo puesto que contamos en todo tiempo con la guía del Espíritu Santo.



 

Intr

domingo, 8 de diciembre de 2024

Yiye Avila - Iglesias Muertas y Mundanas



LA IGLESIA CONVERTIDA EN CLUB SOCIAL -

 


Nick Vujicic sobre las iglesias actuales: “Son un club social, necesitamos arrepentirnos”

El evangelista Nick Vujicic ha expresado su preocupación por el estado actual de la Iglesia, señalando que se ha transformado en un “club y una reunión social” en lugar de funcionar como el verdadero Cuerpo de Cristo.

Nick Vujicic sobre las iglesias actuales: “Son un club social, necesitamos arrepentirnos”

según Vujicic, esta situación ha llevado a una negligencia en la formación de la próxima generación de creyentes. En su análisis, destacó el aumento de adicciones y pensamientos suicidas entre los jóvenes como evidencias de este problema. Vujicic argumenta que estos problemas son el resultado de no estar formando verdaderos discípulos de Cristo en la actualidad, lo que demanda un nuevo enfoque sobre la necesidad del discipulado en las iglesias.

ÚNETE A NUESTRO GRUPO DE Telegram o Whatsapp. Ofrecemos lo más relevante en noticias e imágenes cristianas 🤗   

“Si miramos a nuestro país, hay pastores de jóvenes que son vistos como niñeras, y al 95% de las iglesias a las que he ido nunca iría porque se sienten más como un club, una reunión social”, dijo Vujicic a Christian Post.

El evangelista de 42 años reflexionó sobre el cambio cultural en las iglesias estadounidenses a principios de los años 2000, señalando que muchos líderes comenzaron a adoptar un enfoque más orientado al entretenimiento para atraer a audiencias más jóvenes.

Afirmó que este cambio ha resultado en un debilitamiento del Evangelio, donde se prioriza la diversión y la interactividad en lugar de la enseñanza bíblica sólida.

El evangelista lamentó que los sermones sobre temas importantes, como la salvación y la moralidad, han desaparecido en la mayoría de las iglesias. Observó que hoy en día, la Generación Z enfrenta problemas como el uso de lenguaje inapropiado y comportamientos destructivos, pero que nadie parece responsabilizar a los jóvenes por sus acciones.

Según él, esto lleva a la creación de creyentes que son emocionalmente vulnerables y susceptibles a la depresión.

Nick, autor del libro “Vida sin límites”, abordó los múltiples desafíos que enfrenta la Generación Z, destacando la adicción a la tecnología, con jóvenes que pasan un promedio de siete horas y media al día frente a las pantallas. También mencionaron problemas graves como la explotación sexual, el aborto y sus repercusiones.

El evangelista señaló que muchos adolescentes se están creando “fotos inapropiadas de sí mismos” y expresó su preocupación por el elevado número de niños que reportan haber sido violados a la edad de 17 años. Además, indicó que de los 25 millones de abortos realizados en Estados Unidos, muchos son llevados a cabo por mujeres que asisten regularmente a la iglesia, sin considerar el trastorno de estrés postraumático que puede derivar de estas experiencias.

“No hablamos de las cosas de las que necesitamos hablar, y hasta que comencemos a sanar los corazones rotos que necesitan sanación, establezcamos límites y hagamos responsables a nuestro liderazgo, tengo mucho miedo de lo que está por venir”, aseguró.

LE PUEDE INTERESAR: ¿Por qué el incidente de salud de TD Jakes en el altar es un llamado de atención para todos los pastores?

Según Nick, la solución a los problemas actuales de la Iglesia radica en regresar a los fundamentos de la fe: el arrepentimiento, la responsabilidad y la unidad. Advierte que la Iglesia podría perder su autoridad espiritual y la protección de Dios si no se arrepiente. Nick recuerda que Jesús, desde el principio, actuó con firmeza para corregir a la Iglesia y enfatizó en oración el deseo de que los creyentes fueran uno.

“Necesitamos arrepentirnos. Necesitamos unirnos y adoptar una postura de humildad, y mientras la ventana esté abierta, debemos elegir arrepentirnos, o de lo contrario, creo que podemos ver la mano protectora de Dios sea retirada completamente de nuestro país”, dijo.

El ministerio de Nick tiene la expectativa de que el año 2025 sea un período de arrepentimiento y unidad para la nación. Hace un llamado a recordar a los olvidados y actuar como las manos y los pies de Jesús, enfatizando que el campo misionero no siempre se encuentra lejos, sino que a menudo está en nuestros propios vecindarios.

“Dios nos está llamando a levántate y responde a este llamado”, concluyó.

EL MENSAJE A LA IGLESIA EN LAODICEA

Apocalipsis 3:14-22

Por Israel Zavala (Odessa, Texas).

 



·        Según comentaristas como W. Barclay Laodicea era una de las ciudades más opulentas del mundo, era un centro banquero y financiero.  Era una ciudad que se jactaba de su riqueza. En el año 61 d.C. fue destruida por un terremoto, pero sus ciudadanos eran tan ricos e independientes que rehusaron recibir ayuda alguna del gobierno romano y reconstruyeron la ciudad con sus propios recursos.

·        Laodicea también era un centro de confección de ropa. Laodicea era famosa por su lana suave, violeta-negra lustrosa. Era una ciudad donde se producían grandes cantidades de ropa, particularmente una túnica llamada “trimita”, que era una prenda de vestir de alta calidad hecha de excelente lana negra producida allí mismo.  Laodicea era una ciudad que se sentía muy orgullosa de la ropa que fabricaba.

·        Pero además, Laodicea era también un gran centro médico. Sus médicos eran tan famosos y reconocidos que algunos de ellos figuraban en las monedas de Laodicea. En esta ciudad había una escuela de medicina muy famosa en todo el mundo. En Laodicea de producía el ungüento para los oídos y el colirio para los ojos.  Ellos exportaban el colirio a todas partes como medicamento para curar enfermedades de los ojos.

·        En esta ciudad había una Iglesia de Cristo, la cual para cuando se escribió el libro de Apocalipsis ya tenía aproximadamente 30 años de existencia. Curiosamente las cosas de las cuales más enorgullecían a los residentes de Laodicea fueron precisamente las que el Señor utiliza en este mensaje para hacerle ver a la Iglesia la terrible condición espiritual en la cual ellos se encontraban.

·        Desafortunadamente la Iglesia en Laodicea fue una congregación que no recibió ningún elogio de parte del Señor, una Iglesia de la cual Cristo no pudo decir nada positivo, de hecho fue la única. En la  Iglesia de Sardis tampoco hubo elogios, pero al menos había unos cuantos fieles que no habían manchado sus vestiduras. En Laodicea no había ni siquiera eso. 

 

I.- EL REMITENTE DEL MENSAJE

(Apocalipsis 3:14) “Y escribe al ángel de la iglesia en Laodicea: He aquí el Amén, el testigo fiel y verdadero, el principio de la creación de Dios, dice esto:”

 

·        El autor y remitente del mensaje a la Iglesia en Laodicea es el Señor Jesucristo, sin embargo la descripción que hace de él mismo es la forma ideal y precisa que requería escuchar esta Iglesia local. Ellos necesitaban primeramente comprender quien era Jesús para poder hacer una enmienda de su condición espiritual.

 

a)     Jesús es el Amen

·        La palabra “amen” significa “así sea” y se utiliza por lo general para afirmar algo como cierto o para manifestar nuestra aprobación a algo como lo es una oración o a un mensaje bíblico. “Porque si bendices sólo con el espíritu, el que ocupa lugar de simple oyente, ¿cómo dirá el Amén a tu acción de gracias? pues no sabe lo que has dicho.” (1 Corintios 14:16)

·        Los hermanos de Laodicea (al igual que nosotros) debían de tener bien claro que Jesús es aquel cuyas promesas son fieles y verdaderas y fuera de cualquier duda.  Jesús es garantía de verdad,  es digno de toda credibilidad y es el único en quien podemos confiar plenamente. Poner la esperanza en las cosas materiales o en las riquezas inciertas es el peor equivoco que alguien puede cometer. El único verdadero y digno de confianza absoluta es Jesucristo.

 

b)    Jesús es el testigo fiel y verdadero.

·        Jesucristo es testigo de la verdad, vino al mundo para dar testimonio de la verdad. “Le dijo entonces Pilato: ¿Luego, eres tú rey? Respondió Jesús: Tú dices que yo soy rey. Yo para esto he nacido, y para esto he venido al mundo, para dar testimonio a la verdad. Todo aquel que es de la verdad, oye mi voz.” (Juan 18:37) Jesucristo atestigua la verdad con todo conocimiento de causa, sus ojos como llama de fuego son capaces de escudríñalo todo. Jesús puede decirnos con toda exactitud y precisión lo que él ha visto y oído. El no miente, el no exagera, el no altera las cosas, él es fiel y verdadero. El testimonio de Cristo es exacto y preciso y por lo tanto necesita ser creído por toda persona. La verdad no siempre gusta o agrada, pero es indispensable para poder enmendar nuestros errores. Los hermanos de Laodicea necesitaban aceptar el testimonio fiel y verdadero del Señor.

 

c)     Jesús es el principio de la creación de Dios.

·        Es importante aclarar que Jesús no está afirmando ser la primera criatura creada como algunos falsos maestros mal interpretan. La palabra principio viene del gr. “arque” que significa, “origen, causa o fuente”.  Al decir que Jesús es el principio de la creación de Dios la idea es que todas las cosas tienen su origen en Cristo. “Todas las cosas por él fueron hechas, y sin él nada de lo que ha sido hecho, fue hecho.” (Juan 1:3); “Él es la imagen del Dios invisible, el primogénito de toda creación. Porque en él fueron creadas todas las cosas, las que hay en los cielos y las que hay en la tierra, visibles e invisibles; sean tronos, sean dominios, sean principados, sean potestades; todo fue creado por medio de él y para él. Y él es antes de todas las cosas, y todas las cosas en él subsisten;” (Colosenses 1:15-17)

·        Jesús quería por medio de estos calificativos que los hermanos en Laodicea supieran que estaban cometiendo el error que muchos en día desafortunadamente también cometen. Poner la confianza en lo creado y no en el Creador. Todo lo que ellos tenían procedía de Cristo, Él es el origen de la creación y por lo tanto toda la honra y la gloria siempre debe ser para Él. “A los ricos de este siglo manda que no sean altivos, ni pongan la esperanza en las riquezas, las cuales son inciertas, sino en el Dios vivo, que nos da todas las cosas en abundancia para que las disfrutemos.” (1 Timoteo 6:17)

 

II.- EL REPROCHE DE CRISTO

(Apocalipsis 3:15-17) “Yo conozco tus obras, que ni eres frío ni caliente. ¡Ojalá fueses frío o caliente! Pero por cuanto eres tibio, y no frío ni caliente, te vomitaré de mi boca. Porque tú dices: Yo soy rico, y me he enriquecido, y de ninguna cosa tengo necesidad; y no sabes que tú eres un desventurado, miserable, pobre, ciego y desnudo.”

 

a)     No eres frio ni caliente sino tibio

·        La tibieza espiritual de estos hermanos era tal que provocaban nauseas, asco, y repugnancia a Cristo. Debemos entender que el Señor vomita, a todo cristiano, cristiana o iglesia cuya actitud sea de tibieza. Los fríos espiritualmente son aquellas personas que no han obedecido el evangelio, aquellos que no se han convertido a Cristo, aquellos incrédulos del mundo. Los calientes son aquellos cristianos y cristianas que no solamente algún día fueron bautizados sino que también son de espíritu fervoroso, que están llenos de entusiasmo por la causa de Cristo, que a través de su vida de obediencia dan muestra de su conversión y su  genuina fe en el Señor. Los laodicenses no eran ni una cosa ni otra, pero delante de Dios no hay punto intermedio, no hay estado neutral, entendamos que el Señor lo quiere todo o nada.

·        Ser tibio implica ser indiferente, ser desinteresado, apático, displicente hacia los mandamientos del Señor. Desafortunadamente hay iglesias del Señor donde la tibieza espiritual se apodera de algunos miembros. Cristianos que no acostumbran orar diligentemente a Dios,  que son descuidados con el estudio de la Biblia, que no se examinan a sí mismos en la palabra, que son muy inconstantes en la asistencia a las reuniones de la iglesia, que tienen costumbre de faltar frecuentemente por cualquier causa, que jamás hacen un sacrificio para dar o ayudar a otros, que muestran muy poco interés en las actividades de la Iglesia, que no acostumbran visitar a los enfermos, que no consuelan a los que están de luto, que no predican el evangelio a los perdidos, que no saben lo que es renunciar a alguna comodidad por Cristo, que simpatizan con las modas del mundo, cristianos de poca convicción. Debemos entender que no basta con figurar en la lista de membresía de una iglesia, necesitamos vivir nuestro cristianismo apasionadamente, con ansias y deseos de honrar a Dios con nuestras vidas. Recordemos las palabras del Señor Jesús cuando dijo: “El que no es conmigo, contra mí es; y el que conmigo no recoge, desparrama.” (Mateo 12:30)

·        Qué triste y lamentable es cuando la tibieza se convierte en un estilo de vida, cuando se convierte en algo permanente en ciertos hermanos, cuando pasa el tiempo, a veces los años y la inconsistencia, la debilidad, la indiferencia, la falta de compromiso y convicción es algo que les caracteriza. Es una actitud bien difícil de combatir. 

 

b)    Ojalá fueses frio o caliente pero no tibio.

·        Es fácil entender que Jesús quiera que seamos fervorosos, entusiastas, apasionados, activos, ardientes en todo aspecto de nuestra vida espiritual,  ¿Pero fríos? ¿Por qué dice ojalá fuesen fríos? ¿No sería mejor ser cristiano, aunque solo sea a medias, que no serlo? Definitivamente que no. El Señor preferiría que fuésemos fríos que cristianos tibios. La cuestión es ¿Por qué?

·        Los fríos al menos son sinceros y no aparentan ser algo que en realidad no son. Los fríos tienen también más esperanza de cambiar. Aquellos que ni siquiera han hojeado una Biblia, o aquellos que tal vez han vivido en pecado y deleites diversos, o incluso aquellos que en su ignorancia han hecho cosas terribles como fue el caso de Saulo al perseguir a la Iglesia, pueden convertirse genuinamente al Señor. Muchos casos hemos conocidos de excelentes y fieles hermanos que en su vida pasada vivían totalmente perdidos y hundidos en los vicios y en los pecados más bajos pero que cuando conocieron el evangelio de Jesucristo sus vidas fueron transformadas dando un giro de 180 grados y siendo ahora ejemplos dignos de imitar en la hermandad. Los fríos tienen más esperanza que aquellos que sabiendo hacer lo bueno no lo hacen. Ojalá y fuesen fríos porque los fríos no causan tanto daño en el cuerpo de Cristo como los tibios. ¿Alguna vez ha sentido muchos deseos de vomitar cuando algo no le ha caído bien en el estómago? Así se siente el Señor con la actitud de tibieza, la realidad es que estamos dañamos, lastimando y perjudicando su cuerpo que es la Iglesia.

 

c)     Eran ricos muy pobres.

·        Dice un dicho por allí “Dime de que presumes y te diré de que careces” y este era el caso de los laodicenses. Se sentían orgullosos de sus riquezas, de su posición social, de su buena ropa, de sus ungüentos para los ojos, pero la realidad que el Señor miraba en ellos era una condición triste y deplorable. Eran ricos económicamente, pero ante Dios eran pobres y miserables, estaban ocupados en hacer tesoros en la tierra pero no en el cielo. Usaban la mejor ropa, la de mejor calidad, pero ante Dios estaban desnudos. Y la desnudez es sinónimo de vergüenza, la vida de ellos eso era, una verdadera vergüenza. Pero además estaban ciegos, al grado de no darse cuenta de su terrible situación espiritual. Su ambición y su materialismo los habían llevado a la ruina espiritual y no lo podían mirar.

 

II.- EL REMEDIO PARA SU MAL

(Apocalipsis 3:18-19) “Por tanto, yo te aconsejo que de mí compres oro refinado en fuego, para que seas rico, y vestiduras blancas para vestirte, y que no se descubra la vergüenza de tu desnudez; y unge tus ojos con colirio, para que veas. Yo reprendo y castigo a todos los que amo; sé, pues, celoso, y arrepiéntete.”

 

a)     Comprar oro refinado para ser rico

·        Ellos eran ricos materialmente y tenían puesta su confianza en sus riquezas al grado de decir que de ninguna cosa tenían necesidad. Sin embargo, ellos debían de poner toda su fe y su confianza en Jesús, quien es el Amen, el testigo fiel y verdadero y el origen de todo cuanto existe en este mundo, el único digno de confianza absoluta.

·        La verdadera riqueza solo se puede encontrar en Cristo, nuestra confianza y fe en Jesús es muchísimo más preciosa que el oro. “para que sometida a prueba vuestra fe, mucho más preciosa que el oro, el cual aunque perecedero se prueba con fuego, sea hallada en alabanza, gloria y honra cuando sea manifestado Jesucristo,” (1 Pedro 1:7)

·        Cuando en esta vida lo único que tenemos es dinero realmente somos los más pobres del mundo. Las cosas que realmente tienen valor delante de Dios no se pueden comprar con dinero. Nunca olvidemos las palabras de nuestro Señor “No os hagáis tesoros en la tierra, donde la polilla y el orín corrompen, y donde ladrones minan y hurtan; sino haceos tesoros en el cielo, donde ni la polilla ni el orín corrompen, y donde ladrones no minan ni hurtan.”(Mateo 6:19-20) Una actitud de tibieza nos empobrece, pero una fe viva nos enriquece.

 

b)    Vestiduras blancas para vestirte, y que no se descubra la vergüenza de tu desnudez

·        En lugar de sentirse orgullosos de sus ropas de gala, de sus famosas túnicas negras, en lugar de preocuparse por vestir ropa de excelente calidad para cubrir su cuerpo, el Señor Jesús les exhorta a preocuparse por vestir ropa blanca pues espiritualmente estaban desnudos. Como hemos mencionado, la desnudez es señal de vergüenza, como el mismo verso lo declara, podemos entender que las vidas y las almas de los laodicenses eran literalmente una vergüenza. Es totalmente absurdo estar preocupados por adornar nuestro cuerpo y vestirlo bien cuando el alma esta desnuda, cuando no nos ocupamos en adornarla y cubrirla con ropas blancas. De nada sirve andar bien vestidos físicamente si nuestra vida no refleja que somos fieles cristianos, si nuestra alma está muy corta de belleza. ¿Qué es la ropa blanca? La ropa blanca son las acciones justas de los santos “Y a ella se le ha concedido que se vista de lino fino, limpio y resplandeciente; porque el lino fino es las acciones justas de los santos.” (Apocalipsis 19:8)

·        La Iglesia en Laodicea necesitaba cambiar su manera de vivir, necesitaban comenzar vivir como verdaderos hijos de Dios. Deberían preocuparse por lo que realmente tiene valor para Dios, por sus acciones, por su carácter, por su vida espiritual.

 

c)     Unge tus ojos con colirio para que veas.

·        Ellos presumían su famoso colirio, pero estaban ciegos y no eran capaces de ver su condición, su pobreza, su desnudez, su falta de espiritualidad y compromiso con Dios. La ceguedad viene como consecuencia de llenar nuestra mente de vanidades “Esto, pues, digo y requiero en el Señor: que ya no andéis como los otros gentiles, que andan en la vanidad de su mente, teniendo el entendimiento entenebrecido, ajenos de la vida de Dios por la ignorancia que en ellos hay, por la dureza de su corazón;” (Efesios 4:17-18)

·        Ellos tenían necesitaban una nueva óptica de las cosas, y solo era posible por medio de la Palabra de Dios y la obediencia a su voluntad. Necesitaban diligentemente preocuparse por llenar su vida de virtudes que les permitieran estar ocupados en toda buena obra y de esta manera dejar de vivir en obscuridad “vosotros también, poniendo toda diligencia por esto mismo, añadid a vuestra fe virtud; a la virtud, conocimiento; al conocimiento, dominio propio; al dominio propio, paciencia; a la paciencia, piedad; a la piedad, afecto fraternal; y al afecto fraternal, amor. Porque si estas cosas están en vosotros, y abundan, no os dejarán estar ociosos ni sin fruto en cuanto al conocimiento de nuestro Señor Jesucristo. Pero el que no tiene estas cosas tiene la vista muy corta; es ciego, habiendo olvidado la purificación de sus antiguos pecados.” (2 Pedro 1:5-9)

 

d)    Se pues celoso y arrepiéntete.

·        Celoso viene de del gr. “zelos” que implica un estado caliente o también hervir, como el agua en estado de ebullición.  Los hermanos de Laodicea tenían que cambiar su mente, su actitud hacia Dios y reavivar su entusiasmo, su pasión,  su ardor, su fervor como cristianos. Es cierto que el Señor preferiría que fuésemos fríos antes que tibios, sin embargo, es claro que lo que verdaderamente desea es que su pueblo, su iglesia, sus hijos ardan de entusiasmo y lo demuestren a través de su servicio y convicción “quien se dio a sí mismo por nosotros para redimirnos de toda iniquidad y purificar para sí un pueblo propio, celoso de buenas obras. Tito 2:14

·        Tanto el cristiano tibio, como el incrédulo frío se perderán. Solo los hijos de Dios que sean fervientes en espíritu, aquellos verdaderamente vivan su cristianismo alcanzaran las promesas divinas.

 

IV.- LA INVITACION DEL SEÑOR

(Apocalipsis 3:20) “He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré a él, y cenaré con él, y él conmigo.”

 

·        Es claro que los hermanos de Laodicea, habían sacado al Señor de su corazón, le habían echado fuera y le habían cerrado la puerta.  Cristo había sido desplazado, relegado y excluido completamente de sus vidas. Sus prioridades eran muchas menos Cristo. Él había pasado a un segundo término para estos hermanos. Debemos entender que esto es algo que nos puede pasar a cualquiera cuando somos indiferentes y nos dejamos llevar por la vanidad de la vida. Sin embargo, el amor del Señor es tan grande que es él quien toma la iniciativa de buscar al pecador. Note usted como el Señor está tocando, está llamando, está rogando para que le permitan entrar.  El Señor desea entrar en la vida de toda persona y de todo hermano descarriado.

·        Podemos entender que no todo estaba perdido, aun había esperanza para la Iglesia en Laodicea. Ellos podían volver a tener comunión con el Señor, podían volver a tener una relación estrecha y cercana con él. Cenar con alguien implica tener comunión con dicha persona. La relación con Cristo podía ser restaurada, pero para eso necesitaban abrirle la puerta.

·        Según algunos comentaristas había tres clases de comida, estaba el desayuno que no era más que un pedazo de pan seco remojado en vino. Estaba también la comida del mediodía, la cual los trabajadores no la tomaban en la casa, sino al borde del camino, en algún pórtico o la plaza del pueblo. Y estaba la comida de la tarde, la principal del día. Que se alargaba agradablemente porque ya no se volvía a trabajar. Esta es la clase de cena a la que se refiere Jesús, no una comida apresurada, sino la que se prolonga en grata compañía.  Si alguien le abre la puerta a Jesús, entrará y se quedará sin prisa con él.

·        Jesús no hace uso de la fuerza para entrar, el llama, el toca, el pide que le dejen entrar, pero cada quien toma su propia decisión de abrir o mantener la puerta cerrada. Cada persona tiene la responsabilidad de decidir qué hacer al escuchar el llamado de Cristo. El Señor desea que usted le abra y le invite a pasar, a quedarse en su casa ¿lo hará?

·        El rey Agripa por poco le abre la puerta pero no lo hizo, dejó al Señor fuera de su vida “Entonces Agripa dijo a Pablo: Por poco me persuades a ser cristiano. Y Pablo dijo: ¡Quisiera Dios que por poco o por mucho, no solamente tú, sino también todos los que hoy me oyen, fueseis hechos tales cual yo soy, excepto estas cadenas!”(Hechos 26:28-29)

 

IV.- LA PROMESA AL QUE VENCIERE

“Al que venciere, le daré que se siente conmigo en mi trono, así como yo he vencido, y me he sentado con mi Padre en su trono. El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias.” (Apocalipsis 3:21-22)

 

·        Si la Iglesia en Laodicea corregía todos esos problemas que tenía, su infidelidad, su falta de compromiso, su ceguera, su tibieza, su vanidad, verdaderamente el Señor les recompensaría. Sentarse con Jesús en el trono es sinónimo de reinar con Él. Que privilegio, que honor, que distinción tan grande el sentarse en el trono de Cristo, el reinar juntamente con Cristo. La gente consideraba un honor ser ciudadano de Laodicea, pero, ¡Cuánto mayor honor sería reinar con Cristo en su trono!

·        Cuando nosotros somos cristianos fieles debemos entender que reinamos con Cristo aquí en la tierra, pues no ha hecho reyes y sacerdotes y nos hizo reyes y sacerdotes para Dios, su Padre; a él sea gloria e imperio por los siglos de los siglos. Amén.” (Apocalipsis 1:6)“Pues si por la transgresión de uno solo reinó la muerte, mucho más reinarán en vida por uno solo, Jesucristo, los que reciben la abundancia de la gracia y del don de la justicia.”(Romanos 5:17)

·        Sin embargo debemos entender también que los vencedores, los que sean fieles hasta la muerte reinarán con Cristo por los siglos de los siglos “No habrá allí más noche; y no tienen necesidad de luz de lámpara, ni de luz del sol, porque Dios el Señor los iluminará; y reinarán por los siglos de los siglos.” (Apocalipsis 22:5)

 

CONCLUSIÓN

Este mensaje no es exclusivo de los laodicenses, también es una advertencia para que nosotros no tropecemos con la misma piedra. Examinémonos a nosotros mismos ¿Ha disminuido nuestro entusiasmo como cristianos? ¿Estaremos sacando a Cristo de nuestra vida? ¿Lo hemos relegado para darle más importancia al materialismo y las vanidades del mundo? ¿Estará Cristo Jesús fuera de nuestro corazón llamando a la puerta? “El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias.” (Apocalipsis 3:22)




CON LA MENTE DE LANGOSTA, NO SE PUEDE CONQUISTAR NADA

  MENTE DE LANGOSTA Números 13:32-33 Tu mentalidad importa   Cuando hablamos de mentalidad nos referimos al modo de pensar de una pers...